El Pangea es ese continente único, esa masa en la que todos los seres humanos habitaban el mismo territorio. En este precepto se basó Yuliana Ortiz Ruano, una esmeraldeña que creó esta plataforma como un aporte a la poesía ecuatoriana, y la poesía de América Latina con nombres anónimos, con autores no del todo reconocidos de los rincones del Ecuador y los que están en ciernes de construirse.
Cráneos de Pangea es una exploración a las letras de los talentos de todos los rincones, y de todas las épocas; también es una bandera clara que reza que la poesía no está muerta como parece, porque nadie conoce de ella. Yo me encontré hace algún tiempo con este espacio gracias al programa de radio en que trabajaba, y tuvimos la oportunidad de hablar con Yuliana. Hoy que he revisado una buena parte del contenido de este blog es que puedo compartirlo y decir que vale la pena darse una vuelta.
El espacio se divide en poesías de poetas a los que se llaman cráneos, cada uno tiene asignado un número de cráneo, hoy en día van en el 118, se encuentran también las entradas antiguas divididas por fechas, otro espacio donde se encuentran los poetas destacados de países hermanos con lo mejor de sus letras, y las búsquedas de etiquetas más frecuentadas. Cada entrada incluye una imagen para identificar a los cráneos escritores. Lo interesante sobremanera en este blog es el tema de que todos los autores a los que se les entrega más notoriedad es a los ecuatorianos.
Ecuador sigue interesándose en las letras, la poesía en Ecuador no está muerta. Revisen el talento de los escritores nóveles en este enlace que les dejo justo aquí, se sorprenderán de grata manera al encontrar entre los textos palabras que a veces una misma tiene atoradas en la garganta y que no puede expresar, pero para eso está el poeta, el artista, que lo hace con la elegancia y la sutileza que nosotros no conseguimos.