21 jun 2016

Música del mundo, por el cambio.

De esas tantas publicaciones que aparecen en redes sociales, hay unas que son rescatables porque nos adentran en mundos desconocidos, en alternativas nuevas de escuchar, ver o descubrir espacios o momentos que no habríamos encontrado de no ser por esas otras personas. Siempre el conocimiento que tiene el mundo junto es mejor que el que tenemos en una sola cabeza.

Yo aprendo mucho de las publicaciones de mis amistades, y de gente a la que sigo y que muestra cosas muy lindas, o de aquellos seres que dedicados justo al mundo de la cultura artística, me acercan a propuestas nuevas. Esta vez quiero compartir la belleza que encontré en Playing for changePlayingForChange. (Ojo, algunas etiquetas de Playing for change, no están en este listado)

Esta plataforma comparte música del mundo ya compuesta y publicada, sin embargo tiene la particularidad de ser 'cover' del tema original hecho con músicos de diversos instrumentos, tocando en varios lugares del mundo y siendo estos mismos músicos de todos lados, o del país al que está representando la canción en diferentes lados del globo, de hecho yo llegué a ellos escuchando una versión de La tierra del olvido de Carlos Vives, pero interpretada por varios músicos colombianos con instrumentos colombianos y de todos los rincones de Colombia.

Este rehacer la música, este recrear, enriquece el sentido cultural de la música pues cada artista le asigna su voz, su estilo, su ritmo, su propio tiempo y sus propias pausas. En otros casos, como el de Clandestino de Manu Chao, sirve para el encuentro de continentes distintos, acentos distintos, otras lenguas y sensaciones multiplicadas mediante la música.

Esta herramienta musical es noble, pues fue pensada también como una fundación que busca sacar a los niños en situaciones de riesgo, de alta vulnerabilidad y de peligro alrededor del mundo, mediante el aprendizaje de la música y de tocar algún instrumento, de entregarles una salida humana y sensible con lo que viven, la música hace que tengan un espacio para expeler lo que no se animan a decir, lo que no pueden o no se atreven. En muchos casos la música habla mejor de ellos y de sus vivencias, que ellos mismos.


Yo, como siempre invitarlos a todos.... a disfrutar de la música, a gozar un poco más la vida o a llorar para limpiar el corazón con esa música que es de esas maravillas que solo los vivos disfrutamos. Y si quiere donar para esta fundación que se dedica al arte y al cambio de niños y jóvenes, no deje de hacerlo.