Había ya escrito sobre la máquina perfecta que es el cuerpo, y esta vez mencionaré de un engranaje de esa máquina que es por sí sola, una garantía de calidad cuando quienes las usan lo hacen con cadencia y armonía. También había comentado de las voces de dioses de Post Modern Jukebox y hoy en suerte le corresponde a una cuarta más abajo en el mapa. Perú aporta al espacio musical con un dúo de dos hermanas formidables: me refiero a Las Áñez.
Las comparto en este video. Consiguen entre trova y pruebas con la voz, armar agudos, graves, falsetes, scats y demás para ir narrando historias melódicas, escucharlas es escuchar los ríos golpear las piedras, formar brazos de mar.... escucharlas es escuchar al viento golpear en las hojas de los árboles. Casi lo suyo es entero voz, se apoyan con instrumentalismos cortos, pero de ahí en más, todo es voz.
Mucho de su trabajo se compone del agrupamiento con otras áreas del arte, por eso sus presentaciones nunca son planas, porque incluyen arte de todos los niveles, poesía, títeres, la trova ya mencionada, la música, las formas teatrales de un montaje impecable. Nada más que escribir. El olor de los eucaliptos, las trovas con sabor a café en la voz de estas mujeres que rescatan el origen de la música, el tarareo el silbido. Búsquenlas, no se queden solo con esto...
Mucho de su trabajo se compone del agrupamiento con otras áreas del arte, por eso sus presentaciones nunca son planas, porque incluyen arte de todos los niveles, poesía, títeres, la trova ya mencionada, la música, las formas teatrales de un montaje impecable. Nada más que escribir. El olor de los eucaliptos, las trovas con sabor a café en la voz de estas mujeres que rescatan el origen de la música, el tarareo el silbido. Búsquenlas, no se queden solo con esto...
Su página web: Las Áñez
